La Opinión - June 13, 2007 - Written by Adriana Vargas
Jerome Rose interpretó tres obras
Pasión frente al piano en el TIM
El intérprete demostró no solo dominio en su instrumento, sino comprensión y armonía hacia las obras de estos tres grandes de la música clásica. El segundo concierto del festival de piano del Teatro Isauro Martínez, estuvo cargado de la pasión interpretativa del norteamericano Jerome Rose, pianista que ha recorrido la mayor parte del repertorio de este instrumento en los grandes compositores.
Ayer deleitó a los laguneros con obras de Beethoven, Schumann y Chopin, pasando de la rapidez y eficacia técnica en el primero, a la melancolía y pasión en los dos últimos.
El intérprete demostró no solo dominio en su instrumento, sino comprensión y armonía hacia las obras de estos tres grandes de la música clásica.
Desde hace tres años, el TIM se ha convertido en la sede de este importante festival que comenzó en la sala Beethoven de Monterrey y ha ido captando cada vez más público aficionado a los sonidos de este instrumento.
El segundo concierto de esta serie, gozó de la presencia de un público que llenó casi tres cuartas partes del teatro, lo que demuestra un interés por cultivar el gusto hacia las obras más importantes de este instrumento.
El programa de Jerome Rose comenzó con la Sonata en Mi Bemol mayor número 3 de Beethoven, dividida en cuatro movimientos en los que el pianista demostró dominio técnico, rapidez y gracia.
El Allegro fue interpretado con destreza, parta continuar con el scherzo: Allegretto Vivace, el Menuetto un poco más lento y suave, para concluir con el Presto con fuoco y un alegre final.
Los aplausos no se hicieron esperar y el ejecutante continuó con la Fantasía en Do Mayor de Schumann, comenzando con un primer movimiento apasionado, que irrumpió con su sonido en todo el eco del teatro y su expresión permaneció durante varios minutos.
Y es que según ha expresado el propio compositor, el primer movimiento es la pieza más apasionada que ha compuesto.
De esa pasión, siguió la melancolía del segundo movimiento Moderado, que continuó con una atmósfera romántica durante toda la obra y de un gran contenido emocional.
De esta melancolía, Jerome Rose hizo celebrar su expresividad por el público, para finalizar con la Sonata 2 en si bemol de Chopin, dividida en Grave Doppio Movimiento, Scherzo, Marcha Fúnebre y Presto.
Claves
Trayectoria
La carrera de Rose comenzó cuando el músico tenía tan solo 15 años, en un concierto con la San Francisco Symphony, posteriormente se graduó del Mannes College y del Juliard School of Music.
Ha tocado con las orquestas Filarmónica de Berlín, Filarmónica de Munich, Viena Symphony, Santa Cecilia en Roma, entre otras.
Además, se presenta seguido en Londres con la London Philharmonic.
Torreón, Mexico